CÓLICO DEL LACTANTE
El cólico del lactante es un cuadro que suele presentarse en el bebé entre la segunda y tercera semana de vida y llegar incluso hasta el tercer o cuarto mes.
¿Qué síntomas puede presentar nuestro bebé en caso de padecer un cólico?
El cólico del lactante se caracteriza por un llanto excesivo, irritabilidad e incluso, tonalidad rojiza de la piel. Su posición característica son las piernas dobladas (en flexión) sobre el abdomen. Suele producirse después de una toma, al atardecer o al comienzo de la noche (siendo este momento el más frecuente)
Para diagnosticarlo, los pediatras se basan en la regla del “tres de Wessel” es decir, si el bebé llora:
- Más de tres horas al día.
- Al menos tres días por semana
- Durante tres semanas
¿Por qué se produce el cólico del lactante?
No se ha demostrado científicamente cuál es la causa de los cólicos, aunque hay varias hipótesis plausibles como:
- La inmadurez del aparato digestivo, que produce problemas al hacer la digestión (con problemas asociados como reflujo gastrointestinal, gases y/o estreñimiento)
- Alimentación del lactante
- Estado nervioso del lactante
¿Cómo es una sesión de tratamiento ante un cólico del lactante?
Las sesiones con un bebé son personalizadas y adaptadas a las necesidades del bebé en ese momento, es decir, su estado anímico, hambre, etc.
Se realiza una primera valoración para entender el porqué del problema y se aplican técnicas de vibración, movilizaciones, estimulaciones, etc. Los papás también tendrán una serie de ejercicios para casa, que harán que el tratamiento sea más eficaz.
Es importante saber que las técnicas aplicadas NO producen dolor al bebé y NO son agresivas.
La duración de la sesión depende de lo que nos permita trabajar el bebé (si llora, si está nervioso o cansado …)
Trabajar con bebés es muy satisfactorio, ya que asimilan muy rápido el tratamiento. Utilizamos un protocolo de 2-4 sesiones, con valoración objetiva previa a cada sesión.
TORTÍCOLIS CONGÉNITA
Es un tipo de alteración estructural del cuello que, o bien se presenta en el recién nacido, o bien se manifiesta durante los dos primeros meses de vida. Se asocia a un acortamiento del músculo esternocleidomastoideo, es decir, a una contractura muscular.
Tras la valoración del problema, el tratamiento consistirá en una serie de movilizaciones del cuello, huesos y suturas craneales del bebé, con el fin de devolverles la movilidad articular. Se utilizarán también técnicas de relajación para el músculo contracturado.
Los papás forman parte muy importante en el tratamiento, ya que se les instruirá sobre medidas posturales a adoptar para corregir el problema.
FISIOTERAPIA RESPIRATORIA
La Fisioterapia Respiratoria sirve para prevenir y tratar distintas patologías como el catarro común, otitis, bronquitis y bronquiolitis.
El objetivo es conseguir reducir o liberar el exceso de secreción bronquial a través de los propios mecanismos del paciente. Por tanto, es el propio sistema respiratorio del bebé el que responde a las exigencias de las herramientas terapéuticas utilizadas.
Tras la primera sesión, dependiendo de cómo evolucione el paciente, determinaremos si es necesario realizar otra de seguimiento. Esta terapia suele tener muy buenos resultados, pero, en ocasiones, será necesario acudir más de una vez a consulta.